El vínculo de amor y afecto entre padres e hijos a menudo se considera inherente, lo cual no debería ser el caso. Es bastante común que los niños no amen a sus padres.
El hecho de que los niños no amen a sus padres no debería tomarse demasiado en serio. Los niños siempre establecen una relación emocional con sus padres, a menos que haya algún problema o conflicto.
Por lo tanto, cuando te das cuenta de que tu hijo se ha distanciado de ti o expresa sentimientos de resentimiento u odio, comprende que hay un problema.
Reflejo de tu imagen Una razón por la cual tu hijo podría no sentir ningún afecto hacia ti es un proceso llamado “reflejo de tu imagen”. Esto significa que el niño refleja una imagen de tu comportamiento y acciones hacia ti. En tales circunstancias, el niño no aprende a interactuar con el entorno y el mundo que lo rodea con amor y afecto.
Diferentes niveles de abandono Otra razón por la cual un niño podría no amar a sus padres es el abandono. Esto significa que los padres están ausentes en la vida del niño, y el cuidado y apoyo para el niño están prácticamente confiados a un tercero. Por ejemplo, el niño solo ve a su niñera todo el día y prácticamente no tiene relación con sus padres.
Víctimas de los padres A veces, los niños no aman a sus padres porque se convierten en víctimas de relaciones familiares no saludables, violencia doméstica y abuso.
